La moda de las atracciones de vértigo no tiene fin. Después de que la Torre Eiffel renovara su primera planta con un nuevo suelo de cristal o de que Canadá inaugurara este mirador en las Rocosas, le llega el turno al Puente de la Torre, junto a la Torre de Londres.
La pasarela de cristal del Tower Bridge -uno de los puentes más famosos de la ciudad, construido en 1894- se ha instalado a 42 metros sobre el río Támesis.
La página web del puente ofrece así la nueva atracción: «Experimente el nuevo y espectacular piso de vidrio y las vistas panorámicas impactantes de Londres
desde las elevadas pasarelas y continúe hacia las majestuosas salas de
máquinas victorianas para conocer más acerca del funcionamiento del
puente más famoso del mundo».
La pasarela de cristal mide 11 metros de largo por 1,8 de ancho. En cuanto a los paneles, pesan 530 kilogramos cada uno. Hace unos días se abrió la primera pasarela; la segunda, que completará el proyecto, estará terminada el 1 de diciembre.
Horario: Desde octubre a marzo, de 9:30 a 17:00 horas.
Precio: 11,5 euros (adultos). Niños, 5 euros.
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