Barranquilla, Río, Nueva Orleans, Venecia y Aruba son los destinos para festejar por estos días.
Barranquilla
El Carnaval de Barranquilla, la parranda más
célebre de Colombia, que en el 2003 fue elevada a patrimonio de la
humanidad por Unesco, arrancó oficialmente el 16 de enero con la lectura
del bando, una especie de decreto en el que la reina de turno –en este
caso, la bella barranquillera Marcela García Caballero– da vía libre a
la gozadera que será la ciudad durante las siguientes semanas.
“Declaro, ordeno, dispongo y mando
que, a partir de este instante, todo aquel que se haga llamar recochero,
carnavalero o raspacucayero está obligado a darle una rebaja al mal
genio, a ser mala paga con el aburrimiento, a pedirle presta’o la
carcajada del que está al lado”, sentenció la soberana.
La Guacherna, otro de los actos más
representativos de estas festividades, se llevará a cabo este viernes 29
de enero. Comienza en la carrera 44 con calle 70 y termina en la
cuchilla de Barrio Abajo. Es un desfile nocturno en el que las comparsas
folclóricas hacen gala de su talento, de sus trajes y bailes, e
iluminan las calles con velas y faroles.
El carnaval tendrá su máximo apogeo entre el 4 y el 9 de febrero.
Las comparsas y grupos folclóricos se convierten en un colorido río de
gente, con todo tipo de disfraces y danzas, donde los turistas pueden
interactuar con las reinas, los bailarines, marimondas, monocucos,
garabatos y demás personajes.
El 6 de febrero será la Batalla de Flores, en
el Cumbiódromo de la Vía 40, y el Gran Desfile del Gran Momo, en la
calle 17. En la noche del 6 no se pueden perder la fiesta del hotel del
Prado, amenizada por artistas de la talla de Wilfrido Vargas, Tito
Rojas, Checo Acosta y Poncho Zuleta.
El 8 de febrero será la Gran Parada de
Comparsas, también en el Cumbiódromo. Ese mismo día, desde las 11 de la
mañana, se realizará uno de los actos más importantes: el Festival de
Orquestas, en el estadio Romelio Martínez.
Río de Janeiro
Barranquilla
El Carnaval de Barranquilla, la parranda más
célebre de Colombia, que en el 2003 fue elevada a patrimonio de la
humanidad por Unesco, arrancó oficialmente el 16 de enero con la lectura
del bando, una especie de decreto en el que la reina de turno –en este
caso, la bella barranquillera Marcela García Caballero– da vía libre a
la gozadera que será la ciudad durante las siguientes semanas.
“Declaro, ordeno, dispongo y mando
que, a partir de este instante, todo aquel que se haga llamar recochero,
carnavalero o raspacucayero está obligado a darle una rebaja al mal
genio, a ser mala paga con el aburrimiento, a pedirle presta’o la
carcajada del que está al lado”, sentenció la soberana.
La Guacherna, otro de los actos más
representativos de estas festividades, se llevará a cabo este viernes 29
de enero. Comienza en la carrera 44 con calle 70 y termina en la
cuchilla de Barrio Abajo. Es un desfile nocturno en el que las comparsas
folclóricas hacen gala de su talento, de sus trajes y bailes, e
iluminan las calles con velas y faroles.
El carnaval tendrá su máximo apogeo entre el 4 y el 9 de febrero.
Las comparsas y grupos folclóricos se convierten en un colorido río de
gente, con todo tipo de disfraces y danzas, donde los turistas pueden
interactuar con las reinas, los bailarines, marimondas, monocucos,
garabatos y demás personajes.
El 6 de febrero será la Batalla de Flores, en
el Cumbiódromo de la Vía 40, y el Gran Desfile del Gran Momo, en la
calle 17. En la noche del 6 no se pueden perder la fiesta del hotel del
Prado, amenizada por artistas de la talla de Wilfrido Vargas, Tito
Rojas, Checo Acosta y Poncho Zuleta.
El 8 de febrero será la Gran Parada de
Comparsas, también en el Cumbiódromo. Ese mismo día, desde las 11 de la
mañana, se realizará uno de los actos más importantes: el Festival de
Orquestas, en el estadio Romelio Martínez.
El 9 de febrero, a las 4 p. m., será el entierro de Joselito Carnaval, con el que se da por terminada la fiesta.
El 9 de febrero, a las 4 p. m., será el entierro de Joselito Carnaval, con el que se da por terminada la fiesta.
Informes: www.carnavaldebarranquilla.org/
Las escuelas de samba de Río de Janeiro hacen
gala de todo su ingenio y talento, ante turistas de todo el mundo. /
Foto: Archivo particular
|
Río de Janeiro
Ni la propagación del virus del Zika, que
obligó a fumigar toda la ciudad de Río de Janeiro, ha sido capaz de
menguar los ánimos que se viven en la víspera del carnaval de esta
ciudad brasileña.
Suntuoso, sexi, espectacular y colorido.
Cuatro palabras que describen a una de las fiestas más famosas del
mundo. Y aunque en todo Brasil se celebran carnavales en la misma época,
el de Río es el más majestuoso y reconocido de todos.
El Carnaval de Río, en su edición
2016, se realizará entre el 5 y el 10 de febrero. Y aunque la fiesta se
vive en toda la ciudad, se concentra en el sambódromo.
En este escenario se dan cita las escuelas de
samba que durante todo el año se preparan para la celebración con sus
comparsas, disfraces y carrozas.
Lo que ven los turistas de todo el mundo es un
río de personas desfilando y bailando, y a las sensuales garotas en un
derroche de samba y alegría. Sorprenden las carrozas que acompañan las
comparsas: son gigantes, de hasta más de 50 metros de altura, todas con
movimiento: dragones, leones, tigres y todo tipo de criaturas. Lo que
más llama la atención es que cada movimiento está a cargo de las
personas que van dentro de las carrozas.
Los viajeros pueden disfrutar de una ciudad vibrante y con una interesante movida cultural, gastronómica y bohemia.
Hay que visitar las famosas playas de Ipanema y Copacabana, recorrer el centro histórico y sus emblemáticos edificios y visitar el Cristo Rey, con sus brazos extendidos abrazando a Río.
El Carnaval reúne cada año a cerca de cuatro millones de personas; entre estas, se calcula que un millón son turistas.
Nueva Orleans
El Mardi Gras (martes de grasa en su
traducción del francés al español) se celebra en Nueva Orleans y es una
de las celebraciones más coloridas y famosas de Estados Unidos. Esta
ciudad es toda una mezcla de culturas y tradiciones –gracias a su
herencia francesa y africana–, lo que se ve reflejado en la festividad.
Como en todo carnaval, abundan las máscaras,
las pelucas y la extravagancia en los disfraces. Pero hay un accesorio
que caracteriza al Mardi Gras: los collares. La idea es colgarse la mayor cantidad posible de collares.
Desde los balcones de la Bourbon Street –la
calle más emblemática de esta ciudad del estado de Luisiana y donde se
concentra la celebración–, locales y turistas arrojan collares de todos
los colores y tamaños. Es tradición que las mujeres destapen los pechos para que les arrojen collares.
Quienes vayan al Mardi Gras –entre el 5 y el 9
de febrero– podrán disfrutar de un destino diverso que ya se recuperó
de los estragos del huracán Katrina, que en el 2005 arrasó gran parte de
la ciudad. En el barrio Francés podrán contemplar casonas con balcones
de hierro de las que cuelgan flores y visitar galerías, restaurantes y
cafés.
Siendo la cuna del jazz, resulta imperdible
pasar una noche en uno de los bares donde se presentan agrupaciones que
exaltan este género musical. Imperdible también dar un paseo en un barco
a vapor en el río Misisipi y visitar sus granjas antiguas.
Venecia
Cuenta la historia que el Carnaval de Venecia,
en Italia, tuvo su origen en el año de 1296. Entonces, la nobleza se
disfrazaba para mezclarse con el pueblo. Luego era el pueblo el que se
disfrazaba para evadir los controles de las autoridades.
El principal accesorio de la
vestimenta que caracteriza la celebración son las máscaras, elaboradas a
mano en papel maché y decoradas con hojilla de oro. Las mismas
máscaras que venden en todo tipo de suvenires. Son verdaderas obras de
arte que acompañan trajes a la vieja usanza, con elegantes y finas telas
adornadas con plumas y coronadas con sombreros de tres puntas. Los
elegantes venecianos parecen salidos de lienzos antiguos. El carnaval
dura diez días y es un goce para los residentes, pero, sobre todo, para
los turistas que se integran con los desfiles, conciertos y otras
actividades, y se toman fotos con los mejores disfraces. Resulta un
sueño visitar Venecia en pleno carnaval, con toda la ciudad de fiesta y
con los románticos canales y góndolas engalanados para la celebración.
Es hacer un viaje al pasado y al corazón
veneciano; lo único es que hay que ir bien abrigados, pues por esta
época hace mucho frío y hasta puede nevar en esta parte de Europa. El carnaval se llevará a cabo hasta el 9 de febrero.
Aruba
Aruba, ese paraíso del Caribe a apenas una
hora y media en avión desde Bogotá, no solo es llamada la ‘isla feliz’
por sus playas de arena blanca bañadas por un mar cristalino, verde y
azul: también por su carnaval.
La fiesta más grande del año es una
celebración de un mes que consiste en alegres fiestas callejeras,
desfiles espectaculares y eventos musicales.
Los trajes deslumbrantes y la música juegan un
papel central en todos los eventos, que van desde diferentes elecciones
de las reinas hasta los grandes desfiles que adornan y llenan todas las
calles de San Nicolás y Oranjestad ante miles de espectadores. El
carnaval de Aruba se extenderá hasta el 15 de febrero.
Viajar
Contacta a nuestros asesores en el PBX 4483881 o visita www.viajeseupacla.com.co
No hay comentarios.:
Publicar un comentario