Este singular hotel, ubicado en Jukkasjärvi, en el norte de Suecia, cerca del Círculo Polar Ártico, es el más antiguo en su clase, pues fue construido en 1989, a partir de grandes bloques de hielo y nieve, razón por la cual cada año tiene que ser reconstruido, proceso que inicia en octubre.
En esta oportunidad, los diseños fueron elaborados por 33 artistas de 16 países del mundo. Conozca un poco más de este paraíso invernal en donde una noche puede llegar a costar cerca de 1. 413 dólares, es decir, más de cuatro millones de pesos colombianos.
Este particular espacio, ubicado en las orillas del río Torne, en medio de los bosques, lagos y colinas nevadas, es toda una galería de esculturas de hielo que cada invierno recibe a cientos de visitantes, quienes quieren disfrutar de cada uno de los escenarios congelados de este lugar.
Para que este obra de arte sea posible es necesario que cada mes de marzo los trabajadores del lugar reúnan y almacenen más de 2.500 toneladas de hielo natural del río, hasta que inicie su construcción en el mes de octubre.
El hotel cuenta con 15 suites temáticas talladas a mano en las que se pueden encontrar verdaderas obras de arte, todas ellas únicas e irrepetibles, pues en primavera el hielo se derrite y poco a poco regresa a las aguas del río Torne. El IceHotel está abierto al público desde el 14 de diciembre de 2019 hasta el 7 de marzo de 2020.
El sitio web del hotel describe la estadía en el lugar como "una experiencia surrealista y un recuerdo para toda la vida", en especial, porque las esculturas y el estilo de cada una de las 15 'suits' es diferente. Los dormitorios cuentan con una cama doble, triple o cuádruple elaborada en madera y con un colchón grueso cubierto de pieles de reno.
Son 27 metros cuadrados con una temperatura de -5 a -8 grados centígrados en los que el visitante podrá disfrutar de una visita agradable, con conexión WiFi y una sesión de sauna y un baño caliente antes del desayuno buffet. Además de un recorrido guiado por el lugar en determinados horarios.
Las personas pueden dormir en un saco térmico al estilo de un campamento, además, el hotel les facilita gorro, medias y una chaqueta abrigada para que las personas se mantengan calientes. Adicionalmente el huésped tiene acceso al préstamo de trajes para el invierno, pasamontañas, guantes, de tal forma que los visitantes puedan disfrutar de las actividades al aire libre, ya que fuera del hotel las temperaturas pueden superar los -40 °c.
Este es el salón de ceremonias del IceHotel, un lugar íntimo y especial para matrimonios o eventos como la renovación de votos. Las paredes y el techo están diseñadas con nieve, mientras que la decoración del altar está elaborada en hielo natural, lo que da un toque de magia a cualquiera de sus eventos.
"El elemento efímero se suma a la sensación: cuando no existe un recuerdo arquitectónico, los recuerdos y los votos intercambiados son especialmente apreciados", describe su página web.
A diferencia de las suites, las 20 habitaciones estándar cuentan con la misma decoración. Johan Larsson, el artista que las diseñó, aseguró que al tallar los dormitorios "quería crear una sensación de ser abrazado y protegido por el hielo, una buena noche de sueño para todos los invitados", esto de acuerdo con el sitio web del lugar.
La visita incluye recorridos guiados por cada una de las esculturas del hotel, pero el visitante también puede reservar un espacio para participar de las diferentes actividades que ofrece el lugar, como trineo tirado por perros, esquí y motoesquí, ciclismo y safaris por la aurora boreal. Además, se puede inscribir a clases de esculturas en hielo con los profesionales del hotel.
El hotel también cuenta con un bar denominado 'Torneland', diseñado por los artistas Luc Voisin y Mathieu Brison, una especie de parque de diversiones en honor a los 30 años de historia del lugar. Allí los visitantes podrán disfrutar de juegos esculpidos en hielo, como un carrusel de unicornios, la rueda de la fortuna, montañas rusas y un globo aerostático.
Este es un ejemplo de una de las habitaciones de las que pudieron disfrutar los huéspedes en otra temporada, porque ahora solo se encuentran sus recuerdos y en las redes sociales del hotel, pues al llegar la primavera la suite Spruce Woods, diseñada por los artistas Christopher Pancoe y Jennie O' Keefe, se derritió para regresar a las aguas del río Torne.
Es por ello, que al visitar este mágico lugar los huéspedes obtienen una experiencia única e inolvidable. Sin duda y como lo dice la página web, el IceHotel es "un lugar para descubrir el silencio, la aurora boreal, los relucientes bosques nevados, los renos, las moras, el café y mucho más".
El Tiempo
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